La dirigente indígena hondureña Berta Cáceres de 43 años y madre de
cuatro hijos, fue asesinada la madrugada de hoy cuando se encontraba en
su habitación por un grupo de sicarios que derribaron la puerta de su
vivienda a primera hora de la madrugada y le dispararon repetidamente.
La dirigente, que ya había recibido amenazas de muerte de poderosos
terratenientes locales y de compañías mineras o de energía, contaba con
medidas cautelares de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos
(CIHD).
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