Las raíces del sector privado están cada vez más extendidas en la red
sanitaria pública. Esta tendencia no siempre se manifiesta de forma tan
espectacular como acab de suceder en Madrid con la apuesta de, entre otras medidas, entregar de una tacada al
sector privado el control integral de seis hospitales. Pero el goteo de
fórmulas privatizadoras es un hecho y se extiende en de forma creciente
en distintas autonomías, especialmente las gobernadas por el PP.